Víctor Rochín

Culiacán, Sin.- El programa Sembrando Vida que se ejecuta en la sierra de Badiraguato, sí ha tenido beneficios directos a los más de 200 ejidatarios que están inscritos en este programa, quienes reciben el apoyo federal de 5 mil pesos mensuales para cuidar y reforestar áreas dañadas por incendios o que han sido taladas durante años para la explotación del recurso maderable.
El profesor Martín Galindo, quien es responsable de organizar y capacitar a beneficiarios del programa en la comunidad de Santa Gertrudis, reveló que ahora se ha visto un cambio de mentalidad entre los productores, quienes aprovechan los espacios para la siembra de granos y evitan la quema de árboles.
“Directamente las personas ya tienen sus propias plantas para trasplante, la gente de veras ya siembra más y aparte se benefician mejor con la cosecha porque es para ellos y sobre todo que no se queman ya, no se quema ya la superficie, el programa les impide que quemen, tienen que hacer chorizos con lo que quede, que se pudran para que sirva de abono”, explicó.
Galindo subrayó que aún y cuando no se pueden cumplir con las reglas de operación al 100 por ciento, han hecho lo posible para estar acorde a la normatividad. Han aprendido a hacer composta, viveros, plantación, almácigos, sistema de riego por goteo y fertilización, así como el cuidado de las nuevas áreas reforestadas.