Culiacán, Sin.- Este jueves un juez de control dictó el auto de no vinculación a proceso a Brysia Carolina, la única imputada por el crimen del periodista y columnista Luis Enrique Ramírez, asesinado el 5 de mayo de 2022 en Culiacán.
La mujer señalada del delito de Encubrimiento por Favorecimiento en la causa penal por el asesinato del comunicador, libró el proceso penal. La autoridad judicial determinó que no puede ser sancionada por el delito que acusó la Fiscalía General del Estado.
Se le acusaba de ocultar un teléfono celular con el que tuvo comunicación con su pareja sentimental, quien habría ordenado el asesinato del periodista, presuntamente porque Luis Enrique irrumpió una madrugada en la vivienda de la mujer, molestándola.
El juez determinó que debido a que es concubina de la persona a la que supuestamente encubrió, no puede ser sancionada.
El 16 de julio de 2022, Brysia Carolina fue vinculada a proceso, pero hoy el juez dictó auto de no vinculación en cumplimento a un amparo.
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La ley la excluye de culpa por ser su pareja.
El juez que concedió el amparo, determinó que con Brisya aplica una excluyente absolutoria contemplada en el Código Penal porque tiene una relación de más de 20 años con la persona a la que supuestamente encubrió.
El Código Penal establece que por el delito de Encubrimiento no podrán sancionar a personas con relación familiar con quien cometió el delito, entre ellas el concubino o la concubina. Como fue en este caso.
El juez federal consideró que desde la audiencia inicial o incluso desde la orden de aprehensión, se debió tomar en cuenta la excluyente absolutoria para no llevar a proceso a una persona que finalmente no podrían sancionar.
El crimen.
Madrugada del 4 de mayo de 2022
Según lo revelado en la audiencia inicial, por parte de fiscalía, el periodista habría salido de su casa en la colonia Los Pinos en Culiacán, alrededor de la 1:50 horas de la madrugada del 4 de mayo y le hizo saber a su madre, que se vería con un amigo, pero al salir del inmueble, tomó una dirección distinta a donde había dicho que iría.
Luis Enrique llamó a su madre y le dijo que no se preocupara, que iría a casa de la “señora” y que en un rato volvía.
Presuntamente, alrededor de las 2:00 horas de esa fecha, Luis Enrique habría llegado hasta la casa de Brisya, vivienda ubicada aparentemente a la vuelta de la casa del periodista y de ello existen versiones de testigos oculares que lo afirman.
Implicada argumenta que le faltó al respeto
Según el MP, la imputada, Brisya, habría declarado durante una de las entrevistas ante las autoridades, que Luis Enrique, habría llegado a alterar el orden y gritar improperios desde fuera de la casa, por lo que ella tomó la decisión de llamar a su pareja, quien se reveló, es la segunda persona implicada en el caso y a quien se refirieron por sus iniciales J.E.G.G. (prófugo), posteriormente, llamó al número de emergencias 911.
De acuerdo a lo revelado por la fiscalía, antes que la Policía, habría llegado el vehículo particular, en donde supuestamente viajaban las personas que lo “levantaron”, presuntamente enviados por su pareja y quienes efectuaron al menos un disparo con un arma de fuego al resistirse el periodista a que se lo llevaran; éste gritaba “perdón, perdón”, según testigos.
La Policía llegó después al llamado
Lo anterior, es decir, la privación de la libertad, fue constatado por los testigos que fueron entrevistados por la fiscalía, quienes señalaron que hubo gritos y forcejeo, previo a que sometieran a Ramírez Ramos y que, posteriormente, se lo llevaron en la cajuela de ese automóvil con rumbo desconocido. Se dijo que, minutos después, habría llegado una patrulla, en atención al reporte previo que se había realizado desde esa misma vivienda.
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Hallazgo
El cadáver de Luis Enrique fue hallado el 5 de mayo ‘emplayado’ en las inmediaciones de El Ranchito.
Encubrimiento: Las llamadas a su pareja
En las diversas entrevistas que fiscalía le realizó a Brisya, se detectaron muchos datos imprecisos, pues en algún momento, la implicada dijo que el día 5 de mayo, por la mañana, sufrió un accidente en donde había perdido su teléfono celular y por esa razón no se lo podía entregar a los investigadores, sin embargo, MP comprobó que el equipo móvil fue usado de manera constante, desde el día 4 y los días posteriores, desde donde se efectuaron llamadas telefónicas de manera recurrente a dos números, los cuales, se aparentemente pertenecen a J.E.G.G., su pareja.
Además, fiscalía, a través de Ministerio Público presentó pruebas de que el mismo 4 de mayo, ya en horas de la tarde, Brisya y JEGG estuvieron en el mismo lugar, en Pueblos Unidos, conviviendo.
