Reinventando la Política
La terna enviada al Senado para sustituir al “Ministro Swiftie” Arturo Saldívar, es prácticamente una lista de morenistas que cualquiera que sea electa tendrá una misión en el pleno de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación: sacar de sus casillas a la Ministra Presidenta Norma Piña.
Cualquiera de las tres militantes del movimiento del presidente López Obrador puede repetir el discurso del titular del Ejecutivo en el pleno del Poder Judicial.
¿Y si la terna no pasa en el Senado?
Si es rechazada la terna esta vez y posteriormente se repite, el titular del ejecutivo podría designar a quien quiera. Entonces la jugada es cansar al Senado para meter a la ministra o ministro que él quiera.
Ahora bien, si la terna pasa, tendremos a una Ministra más aguerrida que Yasmin Esquivel o que Loretta Ortiz y tiene una sola consigna: torpedear al Poder Judicial desde el pleno.
En las transiciones los regímenes políticos que toman el poder buscan tomar el poder judicial, para validar el discurso y el proyecto de país que el titular ejecutivo va plasmando. Lo hicieron los sandinistas antes de entregarle el poder a Chamorro, pero se quedaron con la Corte. Esa entrada al poder judicial les facilitó su regreso.
Algo está pasando en Morena que quieren tomar a la Corte.
La tracción del poder es ir por todo y dominar todas las instituciones. La división de poderes pareciera que no existe, lo que sí existe es la división del país.
El tema en Morena es si la ley es la ley. Entonces deberían de dejar en paz a la Corte y la división debería irse a los poderes no al pueblo.