Los Mochis, Sin.- Con resultados regulares para los productores concluyeron las trillas de granos y oleaginosas del ciclo agrícola Otoño Invierno 2023-2024, en la zona norte de Sinaloa, como consecuencia de las diferentes complicaciones que se presentaron a lo largo de la temporada, declaró César Enrique Galaviz Lugo.
El presidente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur, admitió que fue un año difícil por la fuerte sequía que paga en la región, pero aún así se hizo frente en medida de lo posible por sacar adelante este ciclo, en el cual se enfrentaron a demás retos.
“Fue un año difícil donde la naturaleza nos puso a prueba una vez más, ante una fuerte sequía que estuvo presente durante toda la temporada, donde los productores tuvimos que adaptarnos a sembrar principalmente cultivos de baja demanda de agua como frijol, garbanzo, sorgo y cártamo, y en menor superficie cultivos de maíz y trigo”.
Galaviz Lugo recordó, que los productores agrícolas también arrastran números muy ajustados desde las últimas temporadas por los altos costos de producción que predominan en Sinaloa, precios insuficientes de cosechas, y una falta de apoyos de comercialización y financiamientos, lo cual hace poco rentable la actividad del campo en estos momentos.
“Cabe señalar, que en esta temporada la Asociación de agricultores también tuvo que adaptarse ante los diferentes desafíos que se propiciaron de la escasez de agua e incremento de superficie sembrada de cultivos como frijol, garbanzo, sorgo y cártamo, destacando por primera vez la recepción y comercialización de cosechas de garbanzo y cártamo, garantizando con ello una comercialización segura para todos los socios y productores”.
El presidente de la AARFS indicó, que el cultivo de frijol, a diferencia del año pasado, los rendimientos no fueron los óptimos debido a diferentes factores como la escasez de agua que propiciaron rendimientos promedio de 1.5 toneladas por hectárea, asimismo, se incrementó la superficie en Sinaloa con un 116% en comparación con el año pasado.
En cuanto el maíz, fue el cultivo con mayor reducción de superficie en el estado, registrando a través de los permisos únicos de siembra expedidos por las Juntas Locales de Sanidad Vegetal una superficie de 293,642 hectáreas, con una reducción de 44% comparado con el año pasado.
Mientras que en la zona norte, anotó se establecieron en esta temporada 29 mil797 hectáreas versus 106 mil 795 del ciclo anterior, marcando una drástica reducción del 72% debido a la poca disponibilidad de agua.
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