Ciudad de México.- La saxofonista María Elena Ríos ha hecho pública su indignación luego de que el juez José Gabriel Ramírez Montaño ordenara la liberación de su agresor, Juan Antonio Vera Carrizal, en un caso que ha puesto en evidencia la impunidad en Oaxaca. Esta decisión ha llevado a Ríos a acusar a las autoridades judiciales de dejar en el olvido su caso y el de otras mujeres en la región.
En septiembre de 2019, María Elena Ríos fue víctima de un ataque con ácido que le dejó graves heridas en su rostro y cuerpo, requiriendo numerosos tratamientos médicos y quirúrgicos para su recuperación.
El presunto autor del ataque, Juan Antonio Vera Carrizal, estaba detenido, pero tras la resolución del juez ahora ha sido absuelto.
La saxofonista señaló que todo este proceso fue supuestamente “pactado” con la magistrada Berenice Ramírez Jiménez, presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca, lo que ha generado un profundo cuestionamiento sobre la justicia y la impunidad en el estado.
“Esto es Oaxaca, esto es México, esta es la impunidad que viven las mujeres, luchamos por justicia”, escribió en su cuenta de X.
Además, el hijo de Juan Antonio Vera Carrizal, Juan Antonio Vera Hernández, se encuentra prófugo de la justicia, complicando aún más el panorama para Ríos y su búsqueda de justicia.
Durante la audiencia, el juez expresó: “Como consecuencia de ello he resuelto absolver a Juan Antonio Vera Carrizal (…) de la acusación que en su contra formuló la agente del Ministerio Público por el delito de feminicidio en grado de tentativa que se dijo en agravio de la persona de identidad reservada”, lo que ha desatado una ola de críticas y preocupación por el precedente que esto podría sentar en casos futuros.
La situación ha dejado al descubierto la fragilidad del sistema judicial en casos de violencia contra las mujeres en México, recordando la urgente necesidad de acciones que frenen la impunidad y garanticen la justicia para todas las víctimas.
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