
Culiacán, Sin.- Al presentarse un incremento de casos de COVID-19 en el municipio de Culiacán, el Ayuntamiento de nueva cuenta declaró la obligatoriedad del uso de cubrebocas en las unidades del transporte público así como un operativo para vigilar el cumplimiento del mismo, sin embargo, tal supervisión no se está llevando a cabo, declaró Flavio Rolando Ibarra Hernández.
El secretario General del Sindicato de Choferes del Transporte Urbano en Culiacán, criticó la estrategia implementada por el presidente municipal, Jesús Estrada Ferreiro y propuso que sea a los conductores de estas unidades a quienes se les entregue un paquete de cubrebocas para que cuando un usuario no lo porte, ellos puedan proporcionarle uno.
“No, no se aplican. Yo he caminado el centro, he visto las paradas y nada, el presidente municipal muchas veces sale a decir cosas nomás para salir adelante y no las llevan a cabo. Yo le pido que le dé los cubrebocas a todos los choferes y los choferes que los repartan a los usuarios que no traigan”, comentó.
Ibarra Hernández indicó que lo primordial es establecer un acuerdo junto con choferes y concesionarios para presentar una iniciativa dado que no hay una ley en donde se establezca el uso obligatorio de cubrebocas por lo tanto, ni usuarios, ni conductores pueden forzar a portar dicho artículo de protección.
“Se debe de trabajar en eso, en una iniciativa que sea obligatorio y así si se puede actuar, de la otra manera no; el chofer no se va a meter en broncas para llevar a cabo una ocurrencia del presidente”, subrayó.
El líder transportista aceptó que aún hay resistencia por parte de la ciudadanía, dado que 8 de cada 10 usuarios de los camiones urbanos no portan cubrebocas o bien, se lo retiran al subir a una unidad que no cuenta con aire acondicionado.