
La isla de Santorini se encuentra en estado de alerta debido a una serie de temblores que han sacudido la región en las últimas dos semanas.
Esta actividad sísmica ha generado un clima de temor entre los habitantes, llevando a que la mayoría de ellos abandonen la isla por precaución.
Según reportes, aproximadamente 11 mil personas, en su mayoría residentes con sus familias, han optado por dejar Santorini ante el riesgo de un posible terremoto de mayor magnitud o la activación de los volcanes locales.
Esta situación ha provocado escenas de congestión en las vías hacia el aeropuerto y el puerto, con multitudes esperando abordar ferris con destino a Atenas.

En medio de este éxodo, los pintorescos pueblos de Oia y Fira lucen desiertos, recordando a los días de confinamiento por la pandemia de la Covid-19.
La gran mayoría de establecimientos, incluyendo restaurantes, bares y escuelas, han cerrado sus puertas, dejando solo a unos pocos valientes turistas y residentes en la isla.
Según datos oficiales, de una población de 15 mil residentes registrados en el censo del 2021, apenas 4 mil personas permanecen en Santorini en la actualidad, principalmente adultos mayores. Esta situación ha generado incertidumbre y obligado a muchos que se encontraban de vacaciones a posponer su regreso.
Las autoridades, incluido el primer ministro griego, han instado a la calma y a seguir las indicaciones de seguridad ante esta situación. Aunque se estima que las posibilidades de un terremoto de gran magnitud son bajas, la actividad sísmica continúa sacudiendo la isla con frecuencia, lo que ha encendido las alertas.
Expertos en gestión de desastres naturales han advertido sobre el riesgo de deslizamientos de tierra en la caldera volcánica de Santorini, especialmente en las zonas de Fira y Oia.
Aunque la actual actividad sísmica se atribuye a una falla submarina, no se descarta por completo una reactivación volcánica debido a los temblores.

En resumen, la ola de temblores en Santorini ha causado pánico entre los residentes, provocando un éxodo masivo de la isla. A pesar de las garantías de las autoridades sobre la baja probabilidad de un terremoto de gran escala, la incertidumbre y el temor siguen presentes en la población.
Lee también: Casa Blanca: Migrantes enviados a Guantánamo son miembros del Tren de Aragua