Reinventando la Política

En los últimos días ha surgido una narrativa entre expendedores de gasolina y el Gobierno Federal sobre el tema fijar precio de la gasolina. Mientras Profeco pretende fijar mantas exhibiendo la carestía del expendedor, ellos, los expendedores dicen que no pueden exhibirlos ante un precio libre y el IEPS no baje.
En esa confrontación surgió la propuesta de dejar a $24 el litro de gasolina magna, pero a algunos expendedores no les favorece la propuesta. Lo más seguro es que el Gobierno Federal vaya a los controles de precios y esto sería congelar el precio de la gasolina.
Ante el control de precios de la gasolina, los carteles gasolineros enquistados en grandes ciudades van a ser los ganones, porque se van a poner de acuerdo rapidísimo y van a empezar a dar un producto de menor calidad, con tal de sostener el margen de ganancia.
El fijar un precio y sostenerlo va a obligar a los expendedores a sostener la calidad del producto, ya que mientras se habla solamente del precio no se habla de la calidad del producto y de litros completos.
Y ese es el tema de la narrativa, te hablan de un precio, pero jamás te tocan la calidad y el volumen del producto. Eso tambien debería de ser discurso: gasolina a 24 pesos, sin corte y con litros completos.
Sin duda se vale soñar.