
En una escuela secundaria de Iztapalapa, un perturbador caso de bullying ha sacado a la luz la falta de medidas preventivas y punitivas para combatir este problema entre adolescentes, que amenaza tanto su integridad física como emocional.
Fátima Maite, una estudiante, fue empujada desde el segundo piso de la institución por una compañera de clase, consecuencia de meses de acoso debido a su atención por el K-pop, un género musical de la cultura coreana.
La caída dejó a Fátima con graves heridas que la tienen hospitalizada, pero su familia enfrenta dificultades económicas para cubrir sus necesidades médicas y legales.
El padre de la joven compartió en un programa de televisión con Paola Rojas que Fátima había denunciado previamente el acoso, el cual fue ignorado, desencadenando en violencia física.
La comunidad en redes sociales ha expresado su indignación y exigido justicia bajo el hashtag #JusticiaParaFátima.
Diversos medios de comunicación, así como grupos de fans y bandas de K-pop en México, han alzado la voz para demandar soluciones. El padre de Fátima teme que las secuelas físicas le impidan caminar de por vida.
En palabras del grupo BTS México: “Lo que para ella era una expresión de identidad, se convirtió en motivo de crueles burlas, agresiones y una tragedia que la tiene luchando por su vida”.
Embajada de Corea del Sur condena bullying a fan del Kpop
La noche del sábado 15 de febrero, la Embajada de Corea del Sur emitió un comunicado condenando enérgicamente el bullying a Fatima Maite debido a su amor por el Kpop. En el mensaje, la Embajada expresó su rechazo a cualquier forma de violencia, especialmente si está relacionada con los gustos musicales y la pasión por la cultura asiática.
En sus redes sociales, la Embajada remarcó que los valores del K-Pop incluyen la promoción de la diversidad, la inclusión y el sano entretenimiento de la juventud. “Les recordamos que los valores del K-Pop son el pro de la activación física y que promueve la diversidad, la inclusión y el sano esparcimiento de los jóvenes”, señalaron.
Es importante resaltar que este caso pone de manifiesto la necesidad de erradicar el bullying y promover el respeto por las diferentes aficiones y gustos de cada persona.
La intervención de la Embajada de Corea del Sur envía un mensaje claro de apoyo a Fatima Maite y de rechazo a cualquier forma de violencia.
En resumen, el caso de Fátima resalta la gravedad del bullying y la necesidad de medidas efectivas para prevenir y sancionar este tipo de violencia en las escuelas.
La comunidad virtual y los medios de comunicación han unido fuerzas para exigir justicia y combatir esta problemática de manera contundente.