Los músicos integrantes del grupo de música regional mexicana, Los Alegres del Barranco, comparecieron recientemente ante la Fiscalía General de Jalisco debido a una investigación iniciada por presunta apología del delito al mostrar imágenes de Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), durante un concierto realizado el pasado 29 de marzo en el Auditorio Telmex.
Según la Fiscalía de Jalisco, los artistas, junto con un representante de la empresa que administra la agrupación, se presentaron en compañía de sus abogados, pero optaron por no hacer declaraciones.
La Fiscalía de Jalisco compartió un video en su cuenta de X mostrando a personas con el rostro difuminado ingresando a sus instalaciones, incluyendo integrantes del grupo musical, un representante de su administración y sus abogados.
El motivo de la investigación se relaciona con el delito de apología del delito, contemplado en el artículo 142 del Código Penal de Jalisco, el cual establece penas de uno a seis meses de prisión en caso de que el delito no se concrete, y castigos mayores en caso contrario.
Después de que se difundió el video, el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, expresó su desaprobación ante el homenaje al líder delincuencial y abogó por no normalizar la violencia.
Esta situación ha llevado a la consideración de prohibir interpretar narcocorridos en varios estados, como Aguascalientes, Michoacán y Querétaro.
En consecuencia, los integrantes de Los Alegres del Barranco han enfrentado repercusiones, como la cancelación de algunas presentaciones en Tequila Jalisco y otras localidades del país, así como la revocación de sus visas por parte de autoridades estadounidenses debido a posibles vínculos con ‘El Mencho’.
En resumen, Los Alegres del Barranco, reconocidos en el ámbito de los narcocorridos, se encuentran en conflictos legales tras su concierto polémico con la imagen de ‘El Mencho’. La controversia ha generado distintas reacciones a nivel estatal y nacional, evidenciando la sensibilidad en torno a la glorificación de figuras ligadas al crimen organizado.
Ante las reacciones, el grupo Los Alegres del Barranco publicó una disculpa en la que dijo lamentar “profundamente que parte del show haya sido percibida como ofensiva e inapropiada”, y argumentó que sus canciones están inspiradas ‘en contar historias populares dentro de la música mexicana’.
Este caso ha generado un intenso debate que trasciende el ámbito musical, destacando la delgada línea entre la libertad de expresión artística y las responsabilidades legales y éticas en la sociedad.
Las autoridades y la opinión pública seguirán atentos al desarrollo de este asunto que pone en el centro de atención a la música regional y sus mensajes.
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