Mazatlán, Sin.- Dar celeridad a la reconstrucción de la escuela Sixto Osuna de Villa Unión en Mazatlán es la exigencia de padres de familia y docentes.
Este jueves sostuvieron una reunión en el salón de eventos Trejo Rico donde toman clases de forma improvisada, desde aquella Semana Santa del 2022 en que estando de vacaciones colapsó el techo de dos aulas, y por dictamen de Protección Civil Municipal se determinó demoler todo el plantel, debido a sus condiciones.
En dicho encuentro el director Francisco Javier Barrón manifestó la problemática que siguen enfrentando 400 alumnos y sus maestros, ocupando un sitio dedicado a fiestas que busca cobrarles renta tras un año de estar ahí, gasto que se suma al pago de luz eléctrica en el lugar de más de 2 mil pesos por recibo, pese a no tener aires acondicionados y que sólo se encienden algunos abanicos que funcionan.
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“Que están pensando en cobrarnos renta. Porque ya duramos un año aquí, jamás ni ellos, ni su servidor, ni ustedes pensábamos, ni sabíamos el tiempo que íbamos a estar aquí. Ni tampoco tengo otro como la Sixto Osuna Vespertina que tuvo un espacio donde llegar. Díganme ustedes, a dónde nos vamos mientras. – ¿Qué creen que mandó decir SEPyC? – Que la escuela busque velador para cuidar el inmueble escolar, pero SEPyC no añadió a su nómina a ese velador”
Además, indicó que la Secretaría de Educación Pública en Sinaloa, está solicitando el que la comunidad escolar pague por un velador 2 mil 300 pesos a la semana, que se sumará al velador que ya costea la empresa que culminó la primera etapa de la obra, esto con la esperanza de ser la que culmine el proyecto en una segunda etapa.
Ante ello, los padres de familia dieron su punto de vista, en desacuerdo con lo externado, pues si bien se dicen dispuestos a sufragar ciertos pagos, no pueden estar cubriendo todo, por lo que no descartan protestas próximamente a manera de presión para las autoridades.
“Yo la sugerencia que le hago es esa, atacar por las diferencias partes y que en lo local se puedan tomar acciones antes de ir a tomar oficinas a Culiacán, esa es mi sugerencia”
Lamentaron que sus hijos estén tomando clases en un lugar donde no existen las condiciones para el mayor aprovechamiento, pues es un salón para fiestas donde hay materiales que pueden ser de riesgo para los menores, donde no existen divisiones para distribuir a cada grupo, restando así a la concentración de las y los estudiantes y la ventilación no es buena, lo que preocupa con la cercanía de la canícula.
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