Estados Unidos.- Con la pena máxima, Cecily Aguilar, fue condenada a 30 años de cárcel, culpable de participar en el homicidio de la soldado de raíces mexicanas, Vanessa Guillén, en hechos ocurridos en 2020, en Fort Cavazos, antes llamado Hood, en Texas.
Así lo dio a conocer la abogada de la familia de la víctima, mientras que Jaime Esparza, fiscal federal para el Distrito Oeste de Texas, dijo esperar que la sentencia, de consolación y justicia a los deudos.
Aguilar es la única sospechosa detenida por el caso hasta la fecha y se declaró culpable en noviembre pasado, de ayudar a ocultar el cadáver de Guillén, así como de tres cargos más por falsedad de declaraciones.
Las autoridades afirmaron que la ahora sentenciada cayó en contradicciones, intentado encubrir al también militar Aaron Robinson, quien era su pareja sentimental, en ese entonces.
De acuerdo con la investigación, el 22 de abril de 2020, Robinson habría asesinado a Vanessa, golpeándola con un martillo en la cabeza, en la base militar antes mencionada.
Después, el cuerpo del Guillén fue mutilado y escondido en un bosque cercano al cuartel, por Robinson y Aguilar.
Guillén, quien fue vista por última vez en el estacionamiento del Cuartel General del Escuadrón de Ingenieros del Regimiento de Caballería de Fort Hood, fue reportada como desaparecida, pues su identificación, billetera, llaves de su vehículo y habitación, fueron encontrados en la sala de armas.
Los restos de la joven de 20 años, quien había acusado ser víctima de acoso sexual, fueron hallados el 30 de junio del mismo año, después de una intensa campaña por parte de sus familiares para que se atendiera el caso.
Robinson se suicidó, un día después antes de ser interrogado, dejando a Cecily, como la única implicada en el asesinato.
En ese entonces, Aguilar se declaró inocente de imputaciones por asociación delictuosa.
Por otro lado, aunque la corporación militar descartó que Robinson acosara a Guillén, un año después se reportó que si fue víctima de intimidación sexual por parte de otro uniformado.
Los esfuerzos de activistas y familiares, desataron un movimiento que terminó en el establecimiento de la Ley Soy Vanessa Guillén, que se incluye en la Ley de Autorización de la Defensa Nacional de 2022.
Dicha ley determina que el acoso sexual sea reconocido como un delito bajo el Código de Justicia Militar.
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