Culiacán, Sin.- Una moto de trabajo fue quemada de manera intencional, al parecer por su propio propietario durante la mañana de este miércoles 8 de mayo, luego de que un grupo de agentes de la Policía de Tránsito que mantenía un retén “quitamotos” en el sector sur de la ciudad intentaba confiscar la unidad al encontrar irregularidades, pero al final de todos modos se llevaron el vehículo quemado al corralón a bordo de una grúa.
En las redes sociales se viralizó el hecho en el que se muestran videos e imágenes donde la unidad de dos ruedas, al parecer de la marca Itálika está en llamas y junto a ella dos grúas de plataforma de una empresa particular con varias motos a bordo junto con elementos de la Policía de Tránsito que mantenían el operativo.
El reporte del incendio se registró a alrededor de las 8:30 de la mañana se este miércoles, donde se informó sobre un incendio de una motocicleta sobre el carril de norte a sur de la avenida Álvaro Obregón, casi esquina con libramiento Benito Juárez La Costerita, justo a un costado de una zona de yonkes del lugar.
En el sitio el vehículo ligero ardió en llamas de la parte del motor, el asiento y el tanque, pero rápidamente el fuego fue sofocado con ayuda de algunos extinguidores que fueron facilitados por los trabajadores de los negocios aledaños y otros que fueron utilizados por personal de la Policía de Tránsito.
De acuerdo a la versión de los mismos motociclistas que estaban en el lugar del siniestro y en los que quedó grabada su voz, ellos se quejaron de los constantes operativos que se realizan en ese sector, sobre todo a la hora de la entrada del personal de la construcción que labora en el complejo residencial La Primavera y que argumentan solo utilizan el vehículo para ir al trabajo.
“Se pasan de lanza, siempre se ponen en la mañana cuando vamos a entrar y siempre están cazando nomás a quien no trae casco o placas para quitarle la moto, pero cómo no se la quitan a los punteros que andan como si nada por las calles detrás de los guachos y de la Guardia Nacional. Deben de ser parejos, porque ellos nomás están recaudando dinero para las campañas y para ellos mismos, porque te piden para el desayuno y te dejan ir cuando le sueltas mil o 500 pesos” señaló un instalador de pisos vecino del sector sur de la ciudad.
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Según los datos de quejosos, estos operativos también se realizan a la hora de la salida de los albañiles en lugares por donde es obligatorio que tienen que pasar y al no tener otra alternativa, tienen que soltar dinero o simplemente dejar que se lleven la unidad de dos ruedas para posteriormente ir a sacarla con placas y por supuesto, pagar el arrastre de la grúa que ni siquiera es de la policía de tránsito y la cual les cobra entre 1500 y $2000.
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